27/3/13

Imaginémonos -poniéndonos siempre en lo peor- lo siguiente:
Probamos a ser Parisinos aristócratas, decadentes, y convencionalistas. A pesar de ello diríamos....

"Todos necesitamos alimentar alguna vena de loco para que la realidad se nos haga soportable".

Por lo que entendemos que...

"Hay fuerzas susceptibles de crecer indefinidamente gracias a esa modalidad del hábito que es la resignación".

Así, diremos que Proust, ¿era un pesimista? Júzguese por cada cual....Armados de valor, diremos que resignación y hábito suelen ir de la mano, publicitemos la Risa como la muerte del hábito, y el quiebro de la resignación.

Resignémonos a pensar que la resignación ha muerto, a que el hábito ha muerto, ¡¡¡viva el hábito!!!