15/2/12

Fede el viscoelástico

Federico: Buenos días mundo... ¡adiós, cama! Hora de hacer el desayuno.

Cama: Pero, ¿no vas a quedarte un poco más? Mira que mi almohada a estas horas es jugosa y apetecible.

Federico: ¡Eso no va a ser posible! Tengo que limpiar la casa, ponerme a estudiar, ir a hacer unas gestiones, acabar dos proyectos antes del plazo, ir al dentista a media tarde y clases de clarinete justo después.

Cama: Pero vamos a ver, ¿dónde &%$"/ vas a estar mejor que aquí?

Federico: Pues también tienes razón.



Federico volvió entonces a su cama; nadie volvió a verlo nunca. El cerrajero asegura que Federico se convirtió en un colchón supletorio. Hasta hoy, el colchón se encuentra en paradero desconocido.

¿Tendrá esta historia relación con la reciente serie de asesinatos sucedidos en IKEA en horas nocturnas? Las víctimas, todos empleados de dicho establecimiento, merecen una respuesta. Pronto, muy pronto lo sabremos.